Sistemas de gestión de IA: lo que las empresas necesitan saber

Desde el desarrollo de vehículos autónomos hasta el crecimiento de herramientas de inteligencia artificial generativa como ChatGPT y Google Bard, la inteligencia artificial (IA) es la piedra angular de nuestra vida cotidiana. Tomemos, por ejemplo, los asistentes virtuales impulsados ​​por IA que responden a comandos de voz y realizan tareas basadas en las entradas del usuario. Estos son solo un ejemplo de cómo las tecnologías de inteligencia artificial se integran en los dispositivos cotidianos para hacerlos más intuitivos y capaces de interactuar con los humanos de una manera que resulte natural y útil.

Pero va mucho más allá de eso. Las aplicaciones de la IA ya están revolucionando la forma en que operan las empresas. Los avances en el aprendizaje automático y el aprendizaje profundo, en particular, están creando un cambio de paradigma en prácticamente todos los sectores de la industria. La IA, que abarca áreas tan diversas como la atención sanitaria, las finanzas y la tecnología de la información, ha sido pionera en innovaciones y optimizaciones en numerosos campos. Y en el centro de todo, encontrará los sistemas de gestión de IA.

Con los riesgos y la complejidad de la IA, es importante contar con mecanismos de gobernanza sólidos. Los sistemas de gestión de IA desempeñan un papel crucial en el desarrollo y despliegue de tecnologías de IA. Aquí, analizaremos más de cerca la importancia de dichos sistemas para proporcionar evaluaciones y tratamientos de riesgos de IA eficaces.

Inteligencia artificial explicada

La IA es una tecnología que hace que las máquinas y los programas informáticos sean inteligentes, permitiéndoles realizar tareas que normalmente requieren inteligencia humana. Incluye cosas como comprender el lenguaje humano, reconocer patrones, aprender de la experiencia y tomar decisiones. En general, los sistemas de IA funcionan procesando grandes cantidades de datos, buscando patrones mediante los cuales modelar su propia toma de decisiones.

Si bien esta descripción de la IA puede resonar en el profano, no es del todo exacta. Según  ISO/IEC TR 24030:2021 , la IA se refiere a la “capacidad de adquirir, procesar, crear y aplicar conocimientos, mantenidos en forma de modelo, para realizar una o más tareas determinadas”. Esta definición es más precisa desde la perspectiva tecnológica y no se limita a campos en los que ya se utiliza la IA, sino que deja espacio para un mayor desarrollo.

Acerca de los sistemas de gestión de IA

Entonces, ¿cómo funciona la IA? Un sistema de IA funciona sobre la base de datos de entrada, incluidas reglas y datos predefinidos, que pueden ser proporcionados por humanos o máquinas, para realizar tareas específicas. En otras palabras, la máquina recibe información del entorno, luego calcula e infiere una salida procesándola a través de uno o más modelos y algoritmos subyacentes.

A medida que las capacidades de la IA crecen exponencialmente, existen profundas preocupaciones sobre la privacidad, los prejuicios, la desigualdad y la seguridad. Analizar cómo el riesgo de la IA afecta a los usuarios es crucial para garantizar el despliegue responsable y sostenible de estas tecnologías. Más que nunca, las empresas de hoy necesitan un marco que las guíe en su viaje hacia la IA. ISO/IEC 42001 , el primer estándar de sistema de gestión de IA del mundo, satisface esa necesidad.

ISO/IEC 42001 es un estándar reconocido mundialmente que proporciona pautas para la gobernanza y gestión de tecnologías de IA. Ofrece un enfoque sistemático para abordar los desafíos asociados con la implementación de la IA en un marco de sistema de gestión reconocido que cubre áreas como la ética, la responsabilidad, la transparencia y la privacidad de los datos. Diseñado para supervisar los diversos aspectos de la inteligencia artificial, proporciona un enfoque integrado para gestionar proyectos de IA, desde la evaluación de riesgos hasta el tratamiento eficaz de estos riesgos.

Fuente: iso.org

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